Un equipo de investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y de la Universidad de Sao Paulo ha obtenido un nuevo material para la construcción que incorpora fibras de coco verde, cenizas de la cascarilla de arroz y pulpa de celulosa, mezcladas con cemento Portland convencional.
Ideado fundamentalmente para su aplicación en la construcción de viviendas de bajo coste -aunque es apto para todo tipo de construcción, como por ejemplo en cobertizos para ganado- se trata «de una alternativa al cemento tradicional más sostenible y más barata, y con unas altas prestaciones mecánicas y de resistencia».
El trabajo desarrollado por los investigadores españoles y brasileños ha sido publicado en la revista científica Industrial ‘Crops and Products’.
«Es un material idóneo para, por ejemplo, las tejas de las viviendas, como sustituto de la uralita. Su principal novedad reside en la incorporación de fibra de coco verde, que actúa como refuerzo para la matriz de cemento. Como conglomerante actúa la mezcla de cemento con la ceniza de cascarilla de arroz; y lo que hemos conseguido es que las fibras no se degraden en la mezcla con el tiempo, que es lo que ocurre cuando se usa solo cemento», explica Jordi Payá, director del Instituto de Ciencia y Tecnología del Hormigón (ICITECH) de la Universitat Politècnica de València.
En su estudio, los investigadores de la Politécnica de Valencia y de la Universidad de Sao Paulo analizaron cuatro formulaciones del material, tres de ellas con diferentes porcentajes de sustitución del cemento Portland por la ceniza de la cascarilla de arroz (30, 40 y 50%) y una última que sirvió como referencia-, sin fibra de coco verde.
Resistencia
Para comprobar sus prestaciones, los sometieron a altas temperaturas -en concreto 65 grados- durante 28 días. Pasadas estas pruebas de envejecimiento, demostraron que los materiales, incluso el que llevaba un 50% menos de cemento Portland, presentaban unas excelentes propiedades mecánicas, manteniendo su resistencia a la flexión y su tenacidad, es decir, la resistencia ante golpes.
Además, tal y como incide Jordi Payá, el material compuesto obtenido destaca también desde el punto de vista medioambiental. «En primer lugar, porque permite valorizar, darle una salida a la cascarilla de arroz, un residuo agrícola de muy difícil gestión del que sólo en España se generan cada año más de 100.000 toneladas. Además, reutiliza también la fibra de coco verde, abundante en Brasil, y permite reducir hasta la mitad según los ensayos realizados, aunque podría ser incluso más, la utilización de cemento Portland convencional», concluye el director del ICITECH de la Universidad Politécnica de Valencia.
En el trabajo han intervenido los profesores de la UPV y componentes de ICITECH José Monzó, María Victoria Borrachero y Lourdes Soriano, mientras que por la parte brasileña han participado los profesores Holmer Savastano y Sergio Santos, así como la doctorando Camila Pereira. En el proyecto, ha colaborado también la empresa DACSA, que ha cedido la ceniza de la cáscara de arroz a los investigadores de la UPV.
Fuente: Eleconomista