Inspirado por la arquitectura moderna, el artista plástico neoyorquino Calvin Seibert, aprovecha los días de verano para realizar estas particulares esculturas en arena con tan solo un balde, algunas espátulas de plástico y agua.
Según Seibert, la etapa brutalista del Movimiento Moderno le sirve de inspiración y se considera “un turista” de la arquitectura. Desde chico, casi a los 7 años, inspirado por las formas de la terminal de TWA del aeropuerto JFK en Nueva York de Eero Saarinen, comenzó a reproducir estas formas en las montañas de arena de las obras cercanas a su casa.
Seibert considera sentirse más atraído por las formas que definen las primeras etapas de un edificio, mas que una vez que están terminados.
A la hora de la producción, el artista confiesa que no trabaja con ningún tipo de plano o referencia, y si bien realiza constantes bocetos a la hora de trabajar, intenta solo pensar en realizar algo nuevo y no en mejorar lo ya realizado. Para Seibert, el trabajo de bocetado permanece en la mente de manera inconsciente pero en el momento de armar la escultura su forma de trabajo es más bien intuitiva.
Fuente: ARQ Clarín