Las galletas de jengibre son un dulce muy navideño —especialmente en países anglosajones— pero en vez de crear muñecos, árboles y estrellas de Navidad, el fotógrafo Henry Heargreaves y el diseñador culinario Caitlin Levin han decidido crear arquitectura con pan de jengibre.
No me refiero a levantar una casa con pan y galletas de jengibre —que algo he oído que se ha hecho en Estados Unidos— sino a recrear grandes iconos de la arquitectura moderna como la Tate Modern de Londres o el museo Guggenheim de Nueva York usando este navideño bizcocho, golosinas, chicles y chocolate.
Para la Tate Modern, cuya remodelación corrió a cargo de Herzog & De Meuron, han utilizado, además de pan de jengibre, caramelos, algodón de azúcar y chicle, mientras que para el Guggenheim, obra tardía de Frank Lloyd Wright, usaron también regalices y azúcar.
Como podréis comprobar, la serie es toda de museos, como el Museo Nacional de Artes del Siglo XXI en Roma, diseñado por Zaha Hadid, o la magnífica recreación de los lucernarios del museo del Louvre en París, ambos un magnífico ejemplo de que arte, comida y arquitectura se dan la mano en muchas ocasiones.
Fuente: Designboom